domingo, 11 de marzo de 2007

Una obviedad por mas brillante que sea no deja de ser una obviedad

Que Nicanor Araoz, Diego Bianchi, Verónica Gómez, Catalina León, Julia Masvernat, Leo Mercado, Rosana Schoijett y Adrián Villar Rojas son todos excelentes artistas ¡¡chocolate por la noticia!! Nos encantan todos, tienen mundos personales, son sensibles e inteligentes, muy talentosos y están en un momento maravilloso de su trayectoria, flotando y subiendo más y más. Pero les confieso que me sentí muy rara cuando hace unas horas nos levantamos a desayunar en la casa de mi amiga Roxana y me puse a leer el diario La Nación que el papá del Roxy compró. Soy bastante vaga para leer los diarios pero esta vez hubo dos noticias que me dejaron pensando. Y mucho. Una es la de los seleccionados del Premio Petrobras, que son los que recién enumeré. Para mí un premio como este tiene que servir para descubrir artistas, para darle lugar a gente poco conocida. Me parece genial que hayan elegido a Vero, que es una genia en pleno ascenso, a Leo, otro artista que lo tiene todo y que nos va a seguir sorprendiendo, y al divino de Nica, que realmente debe ser conocido por mas gente. Todos ellos necesitan de la difusión y el apoyo que puede darles este premio pero ¿no es un poco decepcionante que el jurado haya seleccionado a ex becarios kuitquenses y un ganador del Currículum Cero? ¿No es mucha pereza por parte de los que tuvieron que elegir? Es una obviedad muy obvia. ¿Qué necesidad había?
No me malentiendan: los felicito a todos los artistas, me parece que es una lista de lujo pero no para un premio como el de ArteBA. Me alegro por los seleccionados y me entristezco mucho por tantos geniales creadores copados a los que no se le está dando una oportunidad porque no son conocidos. Una gran decepción. Los artistas ya consagrados tienen muchas otras oportunidades disponibles, muchos otros premios y becas. Siento que con esta elección nos privaron de conocer mas gente nueva y talentosa.
En la foto una obra del increíble Leo.

Pero eso no es todo. El diario traía más sorpresas. En una de las notitas informativas, bajo el título de Formato Libros, se nos informa a nosotros lectores sobre la colección de títulos de artistas consagrados que ya empezaron a editar en conjunto la editorial Adriana Hidalgo y la galería Ruth Benzacar. Ya vimos en librerías el libro dedicado a ese gran maestro que es Marcelo Pombo, uno de los genios absolutos de los 90. El libro lo miré, pero es imposible de comprar: vale casi 100 pesos. Cuando me comentaron de la colección me puse contenta, pensé que iban a ser accesibles pero me confundí. Igual, es muy lindo. No sé los textos, pero las obras de Marcelo son adorables, un sueño. Lo que no me gustó nada es que en esta notita no aparece citada la persona clave de esta colección que es la indispensable María Gainza. Confieso que hasta hace dos semanas no había leído nada de María. Fue Diana Aisenberg quien efusivamente me la recomendó. Estos últimos días estuve bajándome de internet muchísimas de sus notas ¡¡y son todas buenísimas!! Estoy alucinada con María y me duele que se lleven todo el crédito los mismos de siempre y no se reconozca el mérito ajeno. Es una malvadez que se la haya omitido.
Dos noticias bastante feas para un solo día y un solo diario.