lunes, 10 de septiembre de 2007

Viví la modificación

Hola!!
Desde que suprimí los comentarios Mao y Lenin dio un vuelco. Antes había un tráfico de opiniones enorme. Ahora recibo mails en una cantidad muchísimo menor pero todos ellos son atesorables. En uno muy lindo que recibí ayer Gustavo me decía “Lo que mas me gusta de tu blog es la escritura, la forma en que decís las cosas. Y tu curiosidad por obras bastante diferentes”.
No sé muy bien cómo es, nunca escribí en medios, diarios o revistas, pero por lo que tengo entendido no puede escribirse de cualquier manera. Lo que más me divierte de hacer este blog es la libertad. Libertad total para no tener que modificar lo que me pasa con lo que veo, con lo que vivo, con lo que siento. No me pondría nada bien que un director de sección me diga “cambiá esto porque al perfil de nuestros lectores no les va”. ¡¡Estoy bien así!!
No me gustan las monografías. No las podría escribir. Según lo veo en ellas hay una forma que se impone. Hay como una moderación de los gestos personales ¡¡un horror!! Hay un tono en estos textos que no me gusta nada.
No sé si es fácil o difícil escribir sobre arte. Simplemente escribo en la forma en que me sale, en la que la paso bien escribiendo, en la que me pasa algo.
Veo algunas obras, ciertos libros o películas, escucho determinadas canciones y algo me pasa. Me modifican. Entonces trato de hacer algo con esa modificación. Trato de entender esa modificación. Y me encantaría que los que me leen también puedan percibir algo de esa modificación.
Algo que ya no queda igual. A veces el cambio es grande, otras mínimo. Pero cuando sucede, sucede. Cada uno de mis post es el dibujo de esa modificación. O como diría Diana, es una canción modificada. Otra armonía, otros juegos melódicos.
Malena me contaba hace unos días sobre los interrogantes que se crean alrededor de quién soy. ¡¡Me da una gracia gigante!! Cuando diga “¡¡Hola!!” todos van a decir “Ah, era esta chica”.
Y para mí no es fácil. Nada nada nada. Quiero seguir yendo a inauguraciones y poder ver todo sin que nadie me diga nada. A veces me meto en conversaciones y dialogo con muchos de los que aparecen en estos post. A veces me siento en un costado y me miran como diciendo ¿¿serás vos??
Chicos: la libertad de mi escritura está muy vinculada a este no tener presiones. Por más que sean presiones amables, presiones que no quieren serlo. Posiblemente eso cambie en algún momento. Varias veces estoy tentada en decir ¡¡Hola!! Es una situación muy loca, pero por el momento me permite seguir.
Es un poco aburrido escribir sobre esto.
Como dice Laura, soy muy tímida. Y no muy sociable: no me gusta nada tener que decir cosas y que me estén mirando. Me haría sentir fatal.
A muchos de ustedes los siento muy cerca. Pero muy. Y cada uno de los que hablo lo saben rebien.
Me encanta eso.